Alarma por la marcada bajante y la altura futura del río Paraná: los registros de este domingo marcan 1,16 metros con un descenso de 2 cm con respecto al sábado, indicó la Prefectura Naval Argentina.
Los datos no hacen más que confirmar la tendencia de las últimas semanas: una pronunciada bajante que parece no encontrar su piso y que enciende luces de preocupación entre las autoridades de las ciudades ribereñas como Paraná y Santa Fe.
Además, en su reporte de este viernes, el Instituto Nacional del Agua advirtió que el río Paraná continuará bajando, al menos los próximos días.
Para el 27 de abril, se estima una altura de 0,90 mts en el puerto de Paraná. De cumplirse el pronóstico, siete días más tarde, el 4 de mayo, se espera que se mantenga en la misma altura.
Peor que el año pasado
Si la tendencia se mantiene, posiblemente la situación del río pueda ser más grave que la registrada el año pasado, cuando se produjeron registros históricos.
La principal causa parece estar dada en el déficit hídrico de la cuenca alta, en territorio brasileño. “Está lloviendo poco y nada. El río Grande, que es el principal afluente del Paraná, está en el año más bajo de toda su serie histórica en 91 años. Es decir que desde la naciente del Paraná el río está tremendamente bajo”, dijo el ingeniero en Recursos Hídricos Gustavo Villa Uría, subsecretario de Obras Hidráulicas en el Ministerio de Obras Públicas de la Nación.
En declaraciones al diario El Litoral, el especialista sostuvo: “En algún momento la bajante va a ser peor que el año pasado. Hay incertidumbre, pero hoy por hoy hay un 10% menos de almacenamiento en Brasil en comparación a esta altura del año con el 2020. Por eso están dejando pasar el agua que viene, y lo que viene es prácticamente nada”.
