A mediados de junio, Ibicuy sufrió un brote de coronavirus que obligó a las autoridades sanitarias a dar marcha atrás con habilitaciones y el departamento volvió a Fase 1 de la cuarentena.
El foco de contagio se detectó en la Prefectura Naval local y en pocas horas se confirmaban 14 positivos de prefecturianos con más de 200 personas aisladas en sus domicilios. Las instalaciones del pequeño Hospital Berhing no dieron a basto. Los agentes, primero fueron alojados en campings y luego derivados a los hospitales de Gualeguay y Gualeguaychú.
La cuarentena estricta funcionó, la cantidad de contagios llegó a 45 y se cortó la cadena de contagios. Tras lograr 22 días sin nuevos casos y una semana sin casos activos, se habilitaron multiples actividades como deportes y Futbol 5 y se autorizó a personas que viven en otra ciudad permanecer por 24 horas en Ibicuy.
Estás medidas generaron «un descontrol» en el primer fin de semana de flexibilización y la guardia del hospital Berhing se llenó de jóvenes alcoholizados y descontrolados que no llevaban barbijos. Estas situaciones se repitieron y el personal de Salud del nosocomio reveló a Entremediosweb lo que vivieron.
«Llegaron en situación deplorable al nosocomio, a tal punto de amenazar al personal por pedirles usar barbijos. Vómitos por todos lados y hasta les tiraban a las enfermeras con el papagayo donde orinaban«, señaló una enfermera. «Logramos llegar a cero de pacientes positivos pero estas disposiciones ponen en riesgo la ciudad entera», remarcó.
Por todas estas situaciones y al encontrarse expuestos, el personal sanitario envió una nota al intendente Gustavo Roldan para que arbitre medidas necesarias para detener el «descontrol» que se vive, sobre todo durante los fines de semana.
Carta al Sr.intendente Gustavo Roldán.
Nos dirigimos a usted con el fin de manifestarle nuestra preocupación y descontento, por lo que nos sentimos obligados a hacerle saber y hacer de público conocimiento algunos hechos trascendidos días atrás, que han desbordado nuestro lugar de trabajo. Lo relacionamos con algunas habilitaciones y mayor circulación comunitaria que carecen de «controles «.
Deseamos que considere que el sector sanitario es quien está expuesto a diario en la guardia, realizando el trabajo que consiste en asistir a quien nos necesita en situaciones sencillas y extremas. Este fin de semana pasado nos sentimos vulnerables en el quehacer diario , ya que nuestra seguridad no está garantizada. En primer lugar sabemos del ingreso de personas a nuestra localidad , de lugares que presentan casos positivos de Covid, el NO uso de barbijos en la circulación, reuniones que son de público conocimiento que exceden los horarios permitidos y el número de personas. jóvenes en estados lamentables que ingresan a nuestra guardia, en situaciones que desbordan nuestros sentimientos .
«ESTAMOS EN CUARENTENA » …. Pero parece zona liberada. Sabemos que nuestra comunidad ha cumplido con lo que se ha establecido siempre . ¿Por qué tirar todo por la borda?. Todos deseamos que se normalicen las actividades, pero de manera correcta, garantizando la salud de todos , respetando horarios y por sobre todo haciéndolos cumplir.
Hay hechos que escapan de nuestras manos . Somos quienes nos encontramos en primera línea de esta dura batalla, pero necesitamos que nos cuiden y se respete lo que tanto hemos logrado. Nuestras familias nos esperan al cumplir nuestro turno , y no queremos que nos vean abatidos , y tampoco poner en riesgo su salud. Amamos lo que hacemos , por lo que nos vemos obligados a manifestar nuestro descontento, y exigir más control , que en fin va a beneficiar a toda nuestra comunidad.
Se pueden mejorar muchas cosas con la colaboración de todos. Deseamos que se valore también nuestra labor y no perdamos los que hasta ahora hemos logrado. Con respeto y a la espera de una respuesta positiva.
Personal de Enfermería Hospital Berhing.
De la Redacción de Entremediosweb.