Desde la noche del lunes una importante porción del centro-sur entrerriano comenzó a sentir el alivio con la llegada de las esperadas precipitaciones. Si bien el agua caído hasta el momento no alcanza para recuperar el nivel de reservas de los suelos, ayuda temporalmente a palear el déficit hídrico.
Las lluvias son dispares, pero promedian los 25 y 30 milímetros hasta este martes a la mañana. Además de beneficiar a los cultivos como el trigo -donde en muchos casos el daño ya es irreversible-, maíz y sorgo, también ayuda al crecimiento de las pasturas para la ganadería. Además, se recarga el nivel de agua de los diferentes arroyos y apaga los focos de incendio en la zona de islas.
Por el momento el cielo continúa cubierto y hay expectativas que caiga más agua en la región porque según el pronóstico, la inestabilidad seguiría hasta mediados del fin de semana, consignó Isletas Noticias.