Momentos de tensión y nerviosismo se vivieron esta mañana en la zona de la costanera baja de Paraná cuando, en el marco de un operativo policial ordenado por la Justicia, se dio cumplimiento al mandamiento de desalojar el último carribar que quedaba en pie.
Así se buscó dar por terminado un conflicto que lleva años y que, después de varias ideas y vueltas, se dirimió en la Justicia.
El Carribar Al Paso era el último que quedaba de varios que se habían instalado en el lugar hace año. Era también el único que se resistía a la intención municipal de “limpiar” esa zona y reubicar estos emprendimientos gastronómicos.
La gestión de Sergio Varisco adujo la necesidad de ordenar los espacios públicos. De hecho, el secretario de Legal y Técnico de la Comuna, Walter Rolandelli, señaló que «se superaron todas las instancias judiciales. Después de un año y medio, tras un largo juicio, se llegó a esta instancia».
Esta mañana temprano y con la orden judicial en la mano, los efectivos llegaron al lugar con la intención de desalojar el predio. Al ser notificado, el propietario se resistió. Se inició una tensa discusión con los efectivos, familiares del titular del emprendimiento y algunos dependientes que habían iniciado una quema de cubiertas como forma de protesta.
Finalmente, la Policía detuvo al hombre y desalojó el lugar. Los bomberos zapadores apagaron el fuego y controlaron la situación.
Fotos: Ahora
