Este miércoles, Bienvenidos a bordo entregó su segundo taxi 0KM a Karina, una conductora que alquilaba su vehículo y a la que la suerte le sonrió de la mejor manera. Bajo la atenta mirada de Guido Kaczka, la cordobesa consiguió los dos primeros aciertos en la ruleta, e inspiró bien hondo antes de hacerla girar por tercera vez.
Por fortuna para la taxista el número 8 le dijo ‘sí’, y se convirtió en su amuleto para darle una mejor calidad de vida a sus dos hijos, Brian y Maximiliano.
«Mirá si no te van a ordenar toda la casa, Karina. Deben estar ordenando todo. Taxi y licencia: tenés las dos cosas», le señaló Guido.
«No lo puedo creer. Estoy feliz porque es una lucha mi vida diaria sola con los dos chicos así que no tenés idea lo bien que me viene», dijo la cordobesa, que del escenario se fue directo al taxi que le alquila a su amigo Eduardo, que le dio ‘una mano enorme durante la pandemia’.
«Es una alegría enorme para mí y para mis dos hijos. Desde que vine a Buenos Aires hace cinco años que la vengo peleando. Esto me da la oportunidad de tener una seguridad para mí y para ellos», sostuvo Quinteros.
Sobre cómo vivió los momentos previos a girar la tercera y última ruleta, recordó: «Me encomendé a Dios y pensaba en cómo podía cambiarme la vida. No me quería ilusionar, pero era un momento muy especial. Tengo que agradecerles al programa, a Guido y al apoyo de los famosos que estaban (Hernán Drago, Iliana Calabró, Emiliano Rella y Julieta Puente) porque hicieron que me suelte y disfrute el momento. Hermoso todo».
«Veía el programa por tele desde casa y decía ‘tengo que ir porque lo voy a ganar’, pero cuando estás ahí es que sea lo que Dios quiera», expuso Karina.
«Media Córdoba me llamó para festejar. Mis hijos se enteraron viendo la tele y tengo grabada la reacción de ellos. Vengo pasando cosas desde hace 12 años que los estoy criando sola. Soy muy creyente y creo que Dios hizo todo», cerró la taxista, oriunda de Capilla del Monte.
El Trece