Este miércoles el comedor de la Universidad Nacional de Entre Ríos –UNER– en Paraná no abrió sus puertas para los aproximadamente 300 estudiantes de varias facultades que concurren a diario.
La medida se tomó debido a que en la jornada de ayer, varios comensales «manifestaron malestar físico luego de asistir al comedor«, indicaron en un comunicado desde la Comisión Administradora.
En ese sentido, reconocieron que ante el suceso «de gran preocupación» se realizaron las gestiones para que esta misma mañana se realicen los controles necesarios por parte del Instituto de Control de la Alimentación y Bromatología, dependiente de la Secretaría de Producción de la provincia y el Departamento de Vigilancia, bajo la órbita de la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud de Entre Ríos.
Según el informe preliminar, tras los controles, «no se observaron irregularidades», aunque ahora se aguarda el informe final de los organismos provinciales.
Desde el comedor adelantaron que el jueves volverán a abrir sus puertas y que pondrán a disposición «una fuente de agua segura» para los asistentes.
Entremediosweb pudo saber que ayer se sirvieron varios menú desde pollo hasta pastel de carne y cerdo, «ninguno de los cuales perdió la cadena de frió, no se mezclaron, ni estuvieron mal cocidos», confió una fuente desde el comedor. No obstante, algunos de los alimentos eran de días anteriores, aunque no se guardan más de una semana.
Por su parte integrantes del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Educación manifestaron su preocupación y aseguraron que serían alrededor de 40 las personas que sufrieron algún tipo de malestar, como vómitos o diarrea.
El comunicado completo desde el Comedor Universitario de la UNER:
