Un perrito callejero fue envenenado y un joven, que vio que estaba muriendo en la acera, le realizó maniobras de RCP para salvarlo. Lucas Gabriel Ferreira Martins,
es estudiante de veterinaria y pudo, a pesar de su corta edad, aplicar todos sus conocimiento para regresar a la vida al pobre can.
«El perro se está muriendo», escuchó Lucas, y no dudó. Se calzó los guantes, salió de su casa y comenzó a realizarle maniobras de reanimación cardiopulmonar al perrito.
El esfuerzo y la dedicación dieron sus frutos para el joven, que consideró el hecho como un «bautismo de fuego», ya que era la primera vez que se enfrentaba a una situación así.
La situación fue registrada en video, en una calle de un barrio periférico de Río de Janeiro, por la madre de Ferreira Martins, María José Rosa Martins. La situación, según la mujer, duró unos cinco minutos en los que el joven nunca dejó de insistir con las maniobras de resucitación.
Según el joven, el perro fue envenenado, ya que él pudo ver cómo «expulsó veneno por la boca y la orina».