El domingo 8 de marzo a las 10.45 el cuerpo de Fátima Florencia Acevedo fue encontrado en un aljibe a 500 metros de la casilla donde vivía su expareja Nicolás Martínez. Desde el área de comunicación del STJ se convocó a una conferencia de prensa para las 17 y paralelamente, amigos y asociaciones de mujeres anunciaron una manifestación en las escalinatas de Tribunales para pedir justicia.
Mientras las autoridades judiciales explicaban las circunstancias del femicidio, afuera se desarrollaba sin sobresaltos una manifestación cargada de dolor, impotencia y bronca. Porque la joven madre de 25 años lo venía denunciando desde el 2017 y aunque estaba cansada de la burocracia policial y judicial siguió pidiendo ayuda y protección pero no pudo evitar su asesinato.
En un momento de la manifestación se escucharon los estallidos de los vidrios de la puerta de ingreso. Inmediatamente desde los altoparlantes se advirtió que no fueron las mujeres que dañaron el lugar sino «infiltrados». «Yo soy la amiga de Florencia Acevedo y esto lo hicieron dos hombre que estaban acá y salieron corriendo», señaló la joven consternada por lo hechos mientras Nunca es tarde realizaba un vivo desde el interior del recinto.
En tanto desde la cuenta en Instagram de @chasquiaudiovisual se publicó una foto donde se observa claramente a un hombre con remera celeste pateando y rompiendo la puerta de vidrio.
A partir de la captura del documentalista, de otras imágenes a las que accedió Entremediosweb y los testimonios de las manifestantes se pudo reconstruir el ataque.
Tres hombres (uno de remera gris, otro de color roja y otro de celeste) se acercaron a la puerta lateral de vidrio (próximo a un cajero automático) y con golpes y patadas lograron romper los cristales. Tras lograr su cometido se retiraron del lugar escabulléndose entre las manifestantes. Al ver esta situación una de las participantes los grabó escapando del sitio. Quienes estaban manifestándose aseguraron que eran «infiltrados» y que no estaban participando del pedido de justicia por Fátima Florencia.
Redacción Entre Medios